sábado, 12 de diciembre de 2009

cuestionamientos

“¿Cuántas veces más tendré que preguntarme lo mismo?”, es la interrogante que acecha la mayoría del tiempo su cabeza, esa necesidad de saberlo todo, de entenderlo todo, de analizarlo todo. No vive a medias, solo se cuestiona demasiado lo que le sucede.

Recuerda una de las tantas veces en las que no disfrutó de un momento por buscarle una explicación, porque las personas así suelen hilar fino inconscientemente, su vida está ligada a las razones lógicas y mientras no haya lógica en lo que le acontece, la tranquilidad y el placer no le pertenecen.

Los castillos en el aire que pocas veces ha construido le han llevado a dejar de lado las explicaciones, sin embargo, una vez que ha caído en cuenta de lo ilógico de esto, prefiere destruirlos y también cuestionarse porque lo hizo.

“¡Quisiera disfrutar más y pensar menos!”… Y es que a veces tanto cuestionamiento le abruma, intentó todo para evitar lo que le sucede, pero tal vez no lo suficiente. Ahora se dio cuenta que en realidad no disfrutaba porque no quería hacerlo. Es la naturaleza del ser humano cuestionarse, pero como en todo, hay un punto límite y solo hay dos opciones.

Ha decidido gozarla mientras se dé el momento, y pensar solo si es estrictamente necesario. Aunque en ocasiones su pensamiento se pone en automático y comienza a hilar fino, prefiere no hacerle mucho caso, después de todo, las cosas que sucedan tendrán su razón inherente y al final la gran explicación, la mayor de las explicaciones, la explicación general será la que satisfaga su inmenso deseo de saberlo todo.

2 comentarios:

Salomé Andrade dijo...

intenso gorda! gozar el momento!! la vida dicen q es eso no? momentos!

R.PaúlLópezChamorro dijo...

Hay.... sin ánimo de ofender, debería evitar el THC, talvez así deshile sus pensamientos......
profundo loquilla

.-.