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con una ballesta en las mano apuntando directo a su cabeza, respira hondo y espera con la mirada perdida que alguien ingrese a la habitación de la torre más alta del castillo de caín, una canción de bjork retumba en su cabeza, el canto de un hada, el llanto de su amado, las palabras de su madre; el sol entra por un ventanal que desde el techo ilumina todo, la punta de la flecha la sega por un momento y nada mas, todo se vuelve lento cuando alguien quiere matarse lo divertido es mirar, polvo de hada socapa su muerte, escondida entre los ladrillos unos pequeños ojos y una macabra sonrisa espectantes desaparecen con la luz, con el enfoque de cualquier mirada; la princesa de los decapitados levanta un poco más la ballesta, justo en medio de su frente, se lastima, una larga gota de sangre resbala, ojos, nariz, toma vuelo y se aventura a la nada, mientras baja observa un escote de piel blanca con olor a gloria, un corsé negro como contraste de un vestido lila hermoso, manchas de sangre tinturan de negro el vestido, carmesí en las manos de la princesa todo de los adentros de su amado, que pereció frente a ella, tomándola de los cabellos y pidiéndole perdón por dejarla, se mira las manos y resbala de la derecha de a poco una lágrima de negra de su muñeca, cae y se petrifica en el aire, empieza a llorar y sonríe, nadie le debe ver llorar, es la princesa de los decapitados, NADIE DEBE VERLA LLORAR, nadie se lo merece.

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lo empieza a recordar, sus manos, su olor, su cuerpo, que ya no le puede hacer feliz, que ya no le puede hacer temblar, escucha su voz que se mezcla con lo que esta pensando, con lo que esta pasando, con todo lo que vivió y su sonrisa de repente ha desaparecido y lo extraña... Caín... ha muerto, frente a ella, por ella, "por mi" piensa... "por nada" dice, "por todo" siente; empuña más la ballesta y mejor la apunta temblorosa hacia la puerta; la macabra sonrisa sale de su escondite, la rodea sigilosa, maldita hada de mierda todo esto es por ella, se posa en su hombro sin que ella sepa, "mátate, no tienes salida, no sabes quien va entrar y por fin ya estas sola", como si hablara el aire escucha todo lo que dice el hada la princesa de los decapitados, "piensa... estas sola, nadie es lo que parece, la flecha te va a guiar a un nuevo despertar solo hazlo, mátate"; la lágrima negra cambia de color, se vuelve roja y quema, siente a la maldita hada, desde el más allá su amado todavía la cuida, todavía la espera, él también quiere que la princesa muera, pero no todavía... la paciencia de ese hombre es eterna; se dispara la flecha guiada por el calor de la lágrima rebota en el piso de piedra justo al hombro de la princesa partiéndola en dos, por fin matando a esa maldita hada, hermosa sangre como escarcha baña el busto y la espalda de la princesa, logra volver en si.

un minuto
sus hermosos ojos no dejan de recordar, vuelven a llora, vuelve la ballesta a su quijada, vuelve el hada al paraíso, vuelve ese aroma de tabaco, vuelve otra flecha a la ballesta, vuelve el sabor a cerveza, vuelve Caín, la toma de la mano y se la lleva al infierno con él.